El propóleo es una sustancia creada por las abejas a partir de la resina que se encuentra en los árboles, También contiene sales minerales, aceites esenciales, cera y polen, entre otros. La finalidad es cubrir y proteger sus colmenas de posibles bacterias o virus, manteniéndolas así desinfectadas.
Beneficios del propóleo
Aplicado al uso humano, el propóleo es un excelente remedio natural ante multitud de afecciones, pues sirve para:
- Garganta. Es muy útil para tratar resfriados, dolores de garganta o gripe gracias a sus propiedades antisépticas. También es muy bueno para curar la afonía y aliviar las cuerdas vocales.
- Quemaduras. Ayuda a aliviar las molestias de quemaduras leves así como a cicatrizar.
- Acné. Es un buen remedio para combatir la aparición (o para ayudar a eliminar) los granos, gracias a sus propiedades antiinflamatorias y antibacteriales.
- Estómago. Si tienes problemas como diarrea, gastritis o úlceras, el propóleo te ayudará a aliviar las molestias.
- Boca. Es un buen remedio para eliminar las llagas bucales. También es eficaz para combatir la gingivitis.
Todos estos beneficios que ofrece el propóleo son gracias a las propiedades de esta sustancia. Entre ellas encontramos: antiinflamatorio, antimicrobiano, antiviral, antialérgico, antiséptico, antioxidante.
Cómo tomar el propóleo
El propóleo puede utilizarse en distintos formatos. Por un lado, se puede utilizar de forma tópica, es decir, aplicándolo sobre la piel en forma de crema, jabón, etc. Por otro lado, el propóleo también se puede administrar por vía oral. O sea, que se puede ingerir en infusiones o con la leche, por ejemplo. Por último, también existen enjuagues bucales que incorporan esta sustancia.
A pesar de sus numerosas ventajas para la salud y de ser un producto totalmente natural, antes de empezar a tomarlo siempre es recomendable que lo consultes con tu médico de cabeza para evitar posibles efectos adversos.
