Las mascarillas, junto con el lavado de manos y la distancia física son un elemento indispensable para evitar el contagio del coronavirus. Aunque las medidas se han relajado en exteriores, siempre debemos llevar la mascarilla en el exterior si no se mantiene la distancia de seguridad y, por supuesto, siempre que estemos en un espacio interior. Algunas personas ya sea por su situación personal o laboral deben utilizar las mascarillas durante periodos de tiempo prolongados y esto puede ocasionarles problemas en la piel.
Entre los problemas cutáneos más frecuentes que puede desencadenar el uso intensivo de la mascarilla se encuentran la dermatitis, acné (maskné o acné por mascarilla), erupciones, enrojecimiento, tirantez, picazón y descamación de la piel. Estos efectos, además se pueden ver agravados en el caso de pieles sensibles o cuando ya existe una patología cutánea previa como dermatitis seborreica o dermatitis atópica.
Nuestra piel es la primera línea de defensa que nos protege frente al ataque de los agentes externos. Mantener la piel sana y cuidada es importante para que pueda ejercer su función de forma adecuada. Os dejamos una serie de consejos para cuidar y tratar la piel del rostro y protegerla de los efectos del uso de la mascarilla.
- Elegir la mascarilla adecuada. Es el primer paso para prevenir o disminuir la aparición de irritaciones cutáneas. En el caso de pieles sensibles es recomendable probar con diferentes tipos para ver cuál es la que provoca menos reacción. También es importante cambiar la mascarilla cada cierto tiempo. En general, por razones de seguridad e higiene se suele recomendar reemplazar las mascarillas cada 4 horas. Pero, aunque no se haya agotado el tiempo máximo de uso de la mascarilla, si la notas húmeda o sucia es recomendable cambiarla.
- No usar maquillaje o utilizar maquillajes que no obstruyan los poros (maquillajes no comedogénicos) como los formulados para pieles intolerantes, sensibles o seborreicas.
- Limpiar el cutis. Para evitar los problemas cutáneos ocasionados por el uso de la mascarilla es importante que mantengamos la piel del rostro limpia. Es recomendable lavar bien la cara por la mañana y por la noche con agua tibia y un jabón suave. Si utilizamos un tónico facial o crema limpiadora debemos optar por productos que sean respetuosos con la piel y no la resequen.
- Hidratación. Es importante mantener la piel hidratada para protegerla de los efectos negativos que puede acarrear el uso prolongado de mascarilla. Debemos aplicar una crema hidratante adecuada a nuestro tipo de piel por la mañana y por la noche. Por la mañana es recomendable hacerlo al menos media hora antes de colocarnos la mascarilla para asegurar que la crema penetre en la piel. Además, por el día debemos optar por cremas ligeras que se absorban bien. En nuestra farmacia podemos asesorarte sobre las cremas hidratantes más adecuadas según tu tipo de piel.