Las etiquetas de los productos cosméticos nos aportan información importante para conocer el tipo de producto que estamos adquiriendo, la forma de conservarlo de forma adecuada y cómo utilizarlo correctamente.
En la mayoría de los casos, asociamos los cosméticos a productos para el cuidado facial o maquillajes. Sin embargo, el término cosméticos engloba a numerosos productos. Según la normativa europea en vigor se define como cosmético:
“Toda sustancia o mezcla destinada a ser puesta en contacto con las partes superficiales del cuerpo humano (epidermis, sistema piloso y capilar, uñas, labios y órganos genitales externos) o con los dientes y las mucosas bucales, con el fin exclusivo o principal de limpiarlos, perfumarlos, modificar su aspecto, protegerlos, mantenerlos en buen estado o corregir los olores corporales”
Entre los elementos del etiquetado se encuentran:
- La lista de ingredientes. En esta lista se enumeran los componentes del producto en función de su concentración, de mayor a menor. En la mayoría de los cosméticos encontramos que el ingrediente principal es el agua (aqua). Muchos de los ingredientes activos de los cosméticos no necesitan estar en grandes concentraciones para ser efectivos. Los componentes que son susceptibles de generar reacciones alérgicas deben aparecer de forma obligatoria si están presentes en concentraciones superiores al 0,001%.
- Ingredientes en inglés o latín. Las sustancias químicas se nombran en inglés y los derivados directos de las plantas en latín. No todos los ingredientes que se nombren en inglés tienen que ser necesariamente sintéticos, también hay componentes químicos naturales, como por ejemplo los polifenoles (polyphenols) que se utilizan como antioxidantes en muchos productos de belleza.
- La caducidad. Las cremas y otros productos cosméticos también caducan y esta fecha aparece en el etiquetado. Concretamente aparece el periodo máximo de conservación después de su apertura o PAO (Period After Opening). El PAO es un símbolo de un tarrito con un número y una M (meses). Por ejemplo, si aparece 4M, nos está indicando que podemos utilizar el producto durante 4 meses sin que suponga un riesgo para nuestra salud.
- Conservantes. Es importante fijarse en el listado de conservantes, ya que algunos pueden ser alérgenos. La lista de conservantes es bastante amplia. El uso de conservantes en los productos cosméticos es importante para evitar el crecimiento de microorganismos. Normalmente se utilizan en concentraciones muy pequeñas. Los más comunes son los conservantes sintéticos (formaldehído, parabenos, EDTA, etc.) aunque también pueden emplearse conservantes naturales como el alcohol y los ácidos benzoico y salicílico.
