Seguramente todos hayáis oído alguna vez la expresión “es peor el remedio que le enfermedad”. Pero, ¿sabíais que algunas enfermedades nos protegen de otras?
Según un artículo publicado en la revista British Medical Journal, un grupo de investigadores explica que la gota, un tipo de artritis que se identifica por la inflamación del dedo gordo del pie, protege frente al alzhéimer. Y es que existe la posibilidad de que el ácido úrico, responsable de los cristales que se forman en las articulaciones y causan la enfermedad, tenga un efecto positivo sobre el cerebro. Vieron cómo entre el sector de la población que tiene gota, la probabilidad de sufrir la enfermedad neurodegenerativa era un 24% inferior al de la población general.
El caso del hallazgo sobre las capacidades neuroprotectoras del ácido úrico no es único en la medicina. Varias enfermedades están relacionadas con una reducción en el riesgo de sufrir otros males.
Así por ejemplo, algunos estudios han mostrado que en personas con alzhéimer, la probabilidad de tener un tumor es un 42% inferior.
El hecho de que una enfermedad proteja de otro tipo de enfermedades, tiene un nombre y es el de “comorbilidad inversa”.
Hay otro caso especialmente llamativo, que el de la relación entre una enfermedad rara, la de Niemann Pick, y el ébola. Los pacientes afectados por la primera, son inmunes al virus del ébola.