En numerosos países, los profesionales sanitarios están detectando que existe una reticencia en aumento a la vacunación. Tanto es así que la Organización Mundial de la Salud (OMS) este 2019 ha incluido esta tendencia “antivacuna” como una de las 10 amenazas a la salud global. Lo peor es que, al igual que en humanos, este peligroso movimiento se está extendiendo al mundo de los animales de compañía, y los veterinarios también alertan de que los dueños de mascotas se están relajando en la vacunación de sus animales de compañía, poniendo en riesgo de esta forma no solo la salud de perros o gatos, si no de todas las personas que están en contacto con ellos.
Las vacunas salvan vidas y nos protegen de enfermedades
Hay algo de lo que debemos ser conscientes y no debemos olvidar: las vacunas salvan vidas y han permitido y permiten erradicar y controlar numerosas enfermedades.
¿Qué son las vacunas y cómo funcionan?
Según la OMS las vacunas son “cualquier preparación destinada a generar inmunidad frente a una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos”. Y, ¿qué son los anticuerpos? Nuestro sistema inmune actúa como un policía vigilante para detectar y atacar a cualquier agente extraño, como los virus y bacterias causantes de enfermedades, antes de que nos cause daño. Cuando esto ocurre, entre otras respuestas, las células de nuestro sistema inmunológico producen anticuerpos para defendernos del ataque de agente invasor.
Las vacunas actúan aprovechando la capacidad de memoria que tiene el sistema inmunológico, lo que se conoce como memoria inmunitaria, para protegernos de las enfermedades. Cuando nos ponemos una vacuna, nuestro sistema inmune lo interpreta como si se estuviera produciendo la enfermedad y genera anticuerpos contra el agente extraño. De esta manera, si pasado un tiempo, entramos de nuevo en contacto con ese agente infeccioso, nuestro sistema inmunitario “lo recuerda” y actúa rápidamente para protegernos del mismo evitando de esta forma la enfermedad.
¿Cuántos tipos de vacunas existen?
Existen diversos tipos de vacunas. Cada vacuna está diseñada para “enseñar” a nuestro sistema inmune a combatir un tipo de germen específico y evitar la enfermedad que provoca. De hecho, las vacunas no son algo estático, ya que los patógenos pueden ir cambiando con el tiempo y aparecer cepas diferentes, y por lo tanto, hay que crear nuevas vacunas para ir adaptándose a ellos.
También existen vacunas combinadas, que permiten inmunizar frente a varias enfermedades, como la vacuna DTaP o triple bacteriana que nos protege de la difteria, tétanos y tos ferina.
Las vacunas son medicamentos muy eficaces y seguros. Es importante seguir el calendario vacunal en los niños y jóvenes y si vamos a viajar a un país extranjero tener la precaución de ponernos las vacunas que son aconsejables en dicho país. ¡Recuerda siempre! Las vacunas te protegen a ti y a tu familia.